MANOS DE ESCALADORA

“Eres tan fuerte como lo sean tus manos: lo que no puedes agarrar, no lo puedes escalar”. Udo Neumann

La piel de las manos es la principal herramienta de un escalador; esta debe ser gruesa, resistente pero a la vez flexible.

Si estas empezando a escalar

Hasta que hagas callo y la piel de tus manos engrose vas a sufrir un poco.

Tendrás que parar de escalar porque tus dedos te dolerán y enrojecerán por el roce de la piel con la roca más que por el esfuerzo.

Debes cuidar muy bien de esa piel que está engrosando para que se mantenga elástica y flexible.

Para calmar el quemazón de los primeros días utiliza una buena crema que se absorba bien que hidrate y nutra tus manos después de cada jornada de escalada.

Tus manos te lo agradecerán

Ya tienes manos de escaladora

Una vez que has hecho el callo y con lo que te ha costado generarlo tienes que mimarlo muy bien.

Recuerda que mantener una piel resistente te va a facilitar largas jornadas de escalada, ya que tu piel aguantará sin problema el desgaste con el roce de la piedra.

Seguramente usas magnesio para facilitar la adhesión a la roca y para secar bien las manos, así que no olvides lavar muy bien tus manos después de escalar y retirar así el apreciado magnesio y la suciedad que se haya acumulado.

Si usas un jabón que sea cicatrizante e hidratante a la vez, vas a evitar que pequeños cortes se infecten y que los callos se endurezcan.

Engrosando la piel

Sigues escalando y tu piel ya está engrosada, pero todo tiene un límite.

Si dejas que el callo engrose demasiado corres el riesgo que se arranque en una de tus sesiones de escalada y eso aparte del dolor que te causa te va a obligar a dejar de escalar por unos días.

Por eso es recomendable limar los callos al acabar de escalar, dejar la piel de las yemas de tus dedos uniforme, sin que sobresalga.

Claro, después de limar, debes utilizar una crema que nutra y acelere la cicatrización de tu piel para así tener tus manos listas para el siguiente embate.

Te recomendamos no usar jabones químicos agresivos con la piel ya que tienen a eliminar toda la grasa de la piel y esto va a favorecer la aparición de grietas.

Mantener la piel de tus manos sana, flexible y bien nutrida es la mejor garantía para disfrutar de largas jornadas de escalada.